Por qué Mujeres
Porque las mujeres cargamos con el peso emocional del mundo. Y yo lo siento profundamente.
Sostenemos a otros a veces sin que nos lo pidan.
Hacemos el trabajo invisible: contener, recordar, chequear, anticiparnos a las necesidades, cuidar.
Llevamos la carga mental: tener mil pestañas abiertas en la cabeza todo el día—qué falta en la heladera, cuándo es el próximo turno médico, quién cumple años, cómo se siente cada persona que amamos.
Somos las que nos aseguramos de que todos estén bien.
Y eso agota.
Y, la mayoría de las veces, nadie lo ve, nadie lo nombra, nadie lo paga.
Y en medio de todo eso, nos vamos dejando para después.
Nos acostumbramos a postergarnos, a olvidarnos de lo que queremos, a creer que no hay lugar ni tiempo para nosotras, nuestro deseo y nuestro bienestar.
Por eso hago lo que hago.
Porque creo que necesitamos espacios donde podamos volver a mirarnos.
Donde dejemos de correr detrás de todo lo demás y podamos empezar a elegirnos.
Espacios donde crear momentos de bienestar y también donde reconectar con lo que deseamos y animarnos a ir por eso.
Sin culpa. Sin tener que demostrar nada.
Sólo por el hecho de existir.
Por eso este es un espacio para mujeres y madres.
Un espacio para descansar. Para sentir. Para crear. Para ser sostenida.
Para dejar de sostener sola, y empezar a sostenerte a vos misma con fuerza y con amor.